Juan Manuel Fleitas
«Estar enteramente preparado para toda buena obra trasciende cualquier virtud forjada por el hombre, aún a aquellas que provienen de la más sublime de las intenciones y o motivaciones humanas; es un don divino que pocos tienen la gracia de vivir»
domingo, 15 de octubre de 2017
Patricia Victoria Araujo: Los Tres Enemigos
Patricia Victoria Araujo: Los Tres Enemigos: Existen tres principales enemigos con los cuales debemos lidiar y batallar todos los días. 1. La Carne Se refiere al conjunto de to...
sábado, 9 de julio de 2016
Auténtica Prosperidad, el Divino Anhelo de los Pocos
“Todo esto lo he guardado
desde mi juventud. ¿Qué más me falta?”, fue la respuesta segura de aquel joven,
para enfatizar que había cumplido con todas las ordenanzas relacionadas a la
conducta social, la interacción con los otros hombres. No matarás, No
adulterarás, No hurtarás, No dirás falso testimonio, Honra a tu padre y a tu
madre; y, Amarás a tu prójimo como a ti mismo, son los preceptos que el tal
joven ratificó haber cumplido desde temprana edad. Más aun esperaba una
respuesta confirmante a su última pregunta “¿Qué más me falta?”
La Verdad, encarnada en la
Persona de Cristo Jesús, nuevamente daría una contestación, a manera de oración
condicional, que también elevaría el propósito inicial de la pregunta planteada.
“Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende
lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y
sígueme”. Y el Señor miró y amó al mozo mientras la palabra salía de Su
boca.
El joven al escuchar el mensaje,
se entristeció a causa de descubrir que en él mismo se encontraba el obstáculo
que le impedía alcanzar, lo que creía lograría, si continuaba con su presente
manera de vivir. Se dio cuenta que el amor por sus posesiones, hasta ese
momento, continuaba siendo mayor que su deseo de heredar la vida eterna, de ir
y seguir a Cristo Jesús. Entendió que el amor por su vida era mayor que el amor
por Dios. Y su reacción en consecuencia fue marcharse del lugar, de la
presencia de Cristo, al menos en eso momento.
Los más allegados a Jesús, Sus discípulos, que presenciaban el hecho, reaccionaron con asombro en gran manera al escuchar. Y preguntaron: “¿Quién, pues, podrá ser salvo?”
Los más allegados a Jesús, Sus discípulos, que presenciaban el hecho, reaccionaron con asombro en gran manera al escuchar. Y preguntaron: “¿Quién, pues, podrá ser salvo?”
“26 Y mirándolos Jesús, les dijo: Para los
hombres esto es imposible; más para Dios todo es posible.”
Mateo 19:26 (RVR1960)
Mateo 19:26 (RVR1960)
Y
rumiando en mi interior acerca del significado de este suceso, de pronto el día se tornó brillante,
lleno de luz, ya no fue más uno cotidiano. Y sin
siquiera hablar aun, mi corazón se llenó de gratitud, de inmensurable grandeza,
y no de mí, sino de aquella plenitud que lo llena todo, aún sin entenderlo, y
hasta rebosar. Y sin más, me dispuse a intentar describir lo que de manera
involuntaria inundaba mi mente, mi corazón, mi alma, y así, todo mí ser.
Más que motivado, fui persuadido a
dar gracias, y esta vez, no con palabras que sólo se propagarían en el aire que
saturaba mi soledad. Sino más aun, con un corazón ¡ojala! contrito y humillado,
hacia Él: el objeto de mi amor, el único Digno, el Fuerte y Valiente, el que es
por los siglos de los siglos, el mismo que desde antes de siquiera yo existir
me había amado, con un amor verdadero, inalterable, colmado de infinita virtud
y pureza.
Si, con ese amor decidido, paciente,
sin egoísmo, cuyo gozo originado por el beneficio del ser amado es inmensamente
mayor que cualquier padecimiento producto de la negación propia. Ese amor
sufrido, que no busca sufrir, pero que está dispuesto a hacerlo, y lo hará si es
necesario, en el afán de que el nombre de Dios sea glorificado. En fin, ese
loco amor, que hace reír y llorar al mismo tiempo, pues no hay sentimiento
humano que pueda soportarlo.
Al considerar aun más de lo antes
mencionado, y entendido de mi acotada capacidad para describir el conglomerado de ganancias provenientes de la bondad de Dios, me acerqué confiadamente para decir: “Gracias
Señor por todos tus beneficios, y en especial hoy en esta hora, gracias por una
vez más abrir mi entendimiento, por a pesar de mis múltiples y repetidas
fallas, concederme la gracia de saberme rico, de comprender que sólo en ti
estoy completo, y que es allí donde de verdad soy Prospero”. Y recordé, y deseé
vivir como en la siguiente escritura:
”1 Bienaventurado
el varón que no anduvo en consejo de malos,
Ni estuvo en camino de pecadores,
Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;
2 Sino que en la ley de Jehová esta su delicia,
Y en su ley medita de día y de noche.
3 Sera como árbol plantado junto a corrientes de aguas,
Que da su fruto a su tiempo,
Y su hoja no cae;
Y todo lo que hace, prosperará”
Salmo 1:1-3 (RVR1960).
Tuve ademas presente que en el mundo, en nuestra sociedad moderna, el significado de Prosperidad es sinónimo del volumen de riquezas materiales acumuladas, y estas son proyectadas, y con mucho orgullo exhibidas, a través de la denominada calidad de vida alcanzada. Este modelo de conducta es a su vez legitimado, si al comparársele con el modelo referencial aceptado por la mayoría, obtiene la aprobación de ésta.
Y en ese proceso, con el primordial afán de alcanzar bienes y la aprobación de los muchos, se construye la vida, con los cimientos de ésta colocados sobre lo común, lo que se ve, lo que el mundo hace y comunica es la Felicidad, aun sin haberla alcanzado o vivido de forma genuina. Y como una trampa, la búsqueda de la llamada “Felicidad” se convierte en la aspiración y la tesis del colectivo. Y estimé, como pocas veces antes, las siguientes palabras:
“26 Pero
cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre
insensato, que edificó su casa sobre la arena;
27 y
descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu
contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina.
28 Y
cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina;
29 porque
les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.”Mateo 7:26-28 (RVR1960)
Y con esta apetencia como argumento, hemos desechado el altruismo, la pureza mudado por la corrupción, el honor desvirtuado y hasta nos hemos vanagloriado de lo que debería ser causal de vergüenza. La integridad se nos hace un mito, con frecuencia objeto de burla, y la relatividad de todas las cosas ha pretendido invalidar el significado de la Verdad. Nos es insuficiente un único Camino, a pesar de que las muchas y espaciosas sendas, justificadas por la aspiración humana, lleven en efecto al mismo lugar. La palabra fe es un término conocido por todos pero entendido por muy pocos, y en esta ignorancia, la expresión “ten fe” funge de ánimo para continuar con el esfuerzo y lucha por las metas planteadas: abrirnos paso en el mundo hasta alcanzar un lugar en él. Y Su palabra vino a mí:
“29 He aquí, solamente esto
he hallado: que Dios hizo al hombre recto, pero ellos buscaron muchas
perversiones.”
Eclesiastés
7:29 (RVR1960)
No obstante, ninguno de nuestros
comportamientos como seres humanos debe siquiera sorprendernos, puesto que
hemos sido advertidos de que la principal razón del deterioro moral, ético y
por sobre todo espiritual, radica en nuestro pecado. El cual nos enceguece y
nos incapacita para identificar apropiadamente lo bueno y lo malo, sin mencionar
que nos separa del consejo divino y nos hace presa del maligno. En consecuencia,
somos impedidos de establecer con certeza normas y conductas de convivencia
eficaces, y lo que es más, el egoísmo como fundamento del pecado, no nos
permite, ni permitirá, depositar nuestra confianza en Dios más que en nosotros
mismos, en nuestros sublimes y altivos pensamientos:
“21 Porque todos buscan lo
suyo propio, no lo que es de Cristo Jesús.”
Filipenses
2:21.
“17 Los sacrificios de Dios son
el espíritu quebrantado;
Al corazón
contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios.”
Salmos
51:17 (RVR1960)
Como cabizbajo, como quien es
asaltado por la vergüenza, invadieron mi mente algunas aspiraciones que me
inclinaban a preguntarme: ¿Busco yo un lugar en este mundo? ¿Olvidaré el Honor de
tu Gloria? ¿Me serán indiferentes las memorias de tu sacrificio, de tu Obra en
la Cruz? ¿Dónde estás Señor, mi Cristo? Y rogué, y aun ruego a mí Señor:
“Ayúdame a serte fiel hasta el fin”.
Y una vez más me fue creíble, me hizo
creer, que Su Gloria se muestra en nuestra debilidad, que Su sacrificio fue una
vez y para siempre, suficiente. Que Su obra perfecta tuvo, tiene y tendrá como
objeto no sólo darnos fe, sino también perseverar en ella, en Él. Que está en el
cielo, a la diestra del Padre, y que tiene el dominio de todas las cosas, y más
aún, que en Su infinita Gracia y con Su incomparable Fidelidad, terminará la
obra que le ha placido comenzar en todos y cada uno de Sus hijos, Su iglesia. Y
me agradó recordar:
“6 estando persuadido de esto,
que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de
Jesucristo;”
Filipenses
1:6 (RVR1960)
Proseguí entonces, y como quien
recuerda a su único héroe, hice memoria de Su valiente caminar hacia la muerte
en la cruz del Calvario, cuando dijo: “Padre,
perdónalos, porque no saben lo que hacen”, expresión que manifestó suma
sabiduría, ya que no es sensato esperar que haya luz, y ser iluminado, por
aquellos que sólo han vivido en la oscuridad y aprendido de las tinieblas. Es
una locura esperar ser amado, o que exista alguna manifestación genuina de
amor, de quienes sólo buscan lo suyo propio. Pero por sobre todo, en esa simple
oración se expuso Su carácter y Su incomparable Amor, pues entre inconmensurables
características más, el verdadero Amor lo soporta todo, lo perdona todo:
“34 Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y
repartieron entre sí sus vestidos, echando suertes.”
Lucas
23:34 (RVR1960)
Me fue concedida la gracia de ver
este perfecto ejemplo ¡fui alcanzado por la cordura! Descifré que sí hay
sensatez y es sensato, y hasta virtuoso, resplandecer en las tinieblas, amar a
quienes nos vituperan y calumnian, ser amables para con todos, incluyendo a
aquellos que nos aborrecen. Que es honroso, y Glorifica el nombre de Dios,
cuando amamos a los que nos rodean de la misma forma que Cristo nos amó y nos continúa
amando. En fin, que manifestamos de manera autentica el amor de Cristo y
conocemos mejor el significado de este Amor, cuando incluso lo entregamos a los
que se han etiquetado a sí mismos como nuestros enemigos.
Y me pregunté: si Su ejemplo no es del
todo suficiente para hacernos creer ¿que lo hará? En mi limitada humanidad no logré imaginar otro hecho que pudiera hacerlo. Sin embargo, consideré que la Misericordia del
Señor es nueva cada mañana, que Sus pensamientos no son los míos. Que hay
esperanza y es posible rogar al Padre Eterno, en el nombre de Cristo Jesús y
con un corazón compungido y humillado, que nos permita guardar y
vivir Su consejo:
“38 Oísteis que fue dicho:
Ojo por ojo, y diente por diente.
39 Pero yo os digo: No
resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha,
vuélvele también la otra;
40 y al que quiera
ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa;
41 y a cualquiera que te
obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos.
42 Al que te pida, dale;
y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.
43 Oísteis que fue dicho:
Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo.
44 Pero yo os digo: Amad
a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os
aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;
45 para que seáis hijos
de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y
buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.
46 Porque si amáis a los
que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los
publicanos?
47 Y si saludáis a
vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los
gentiles?
48 Sed, pues, vosotros
perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.
Lucas
23:34 (RVR1960)
Examiné en consecuencia mi propia
prudencia, que no debo creerme sabio en mi propia opinión, en lugar de procurar
estar alerta para no ser influenciado por la
corriente del mundo. Que no en vano, al pueblo de Dios se nos ha solicitado,
a manera de ruego y pidiéndonos recordar Sus misericordias para con nosotros:
que no nos conformemos a este mundo, sino más bien que renovemos nuestro
entendimiento para que podamos comprobar, ser testigos, de cuan Buena, Agradable
y Perfecta es la Voluntad del Padre. Que hemos sido llamados, no sólo a ser la
luz de este mundo, sino a alumbrar. Que nuestra esencia es brillar, puesto que
en la Luz no hay ninguna tiniebla. Y mientras escribía me acompañaban las
escrituras:
“1 Así que, hermanos, os ruego
por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio
vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional.
2 No os conforméis a este
siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento,
para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.“
Romanos
12:1-2 (RVR1960)
“14 Vosotros sois la luz del mundo; una
ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder.”
Mateo 5:14 (RVR1960)
“5 Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos:
Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él.”
1 Juan 1:5 (RVR1960)
Y de nuevo creí, y creo, que la
iglesia de Dios no está sola en esta gran comisión, sino que Dios es fiel, Él es
quien culminará la obra que comenzó, que Su esperanza no avergüenza, que
gracias a Él, y sólo a Él, poseemos la oportunidad de alcanzar la meta del
supremo llamamiento en Cristo Jesús. Que si el miedo nos llegase a embargar, y
aunque este no merme, sabemos que podemos con confianza acercarnos a nuestro Señor,
quien fue tentado en todo, y padeció por nosotros, el cual no hizo pecado, ni
se halló engaño en su boca. Quien nos dejó su integro ejemplo para que sigamos
sus pisadas.
Porque debajo de Sus alas tendremos
refugio, y sostén en Su verdad, y hallaremos Gracia, ese regalo inmerecido que nos
inclina a depositar nuestra confianza en Él, y de pronto descubrir la Paz, esa Paz
que nunca el mundo dará, pues no le pertenece, ni quiere poseer. La verdadera Paz,
la que no descansa en nada que pueda hacer el hombre en su propia voluntad,
sino que reposa sobre lo que Dios ya hizo, y en Su perfecta Lealtad ha dicho
que continuará haciendo hasta Su día de Jesucristo.
Por ello no debemos desmayar en pedir
a nuestro Padre que aumente nuestra Fe, para ver mejor, para dirigirnos a
colocar nuestra mirada en Cristo Jesús, el autor y consumador de la Fe. Para
así poder vivir cada día esperando y trabajando por las cosas de arriba, que
están en los lugares celestiales, donde se encuentran las riquezas eternas, las
que son invisibles para muchos. Aquellas que aun siendo gratuitas, no pueden
ser alcanzadas por la voluntad del hombre, por mucho que se afane.
Roguemos entonces a Dios, al Dios
de Israel, dado que sin Él no podríamos ser constantes. Para que en Su
Fidelidad coloque en nuestros corazones el deseo y la voluntad, cada día, de anhelar
estas riquezas duraderas, las eternas, aquellas que no se deterioran ni pueden
ser arruinadas en el tiempo, o ser arrebatadas de la mano de su mayordomo, esas
riquezas que no provienen de injusticia alguna, y que la ignorancia del mundo ha
menospreciado, y aun subestimado. Supliquemos al Padre que nos conceda poder exclamar
de forma legítima y con abundante evidencia:
“12 Sé vivir humildemente, y sé
tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado
como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad.
13 Todo lo puedo en Cristo que
me fortalece.”
Filipenses
4:12-13.
Y estimé sobremanera la oración
del justo, la de Su iglesia, los que piden al Padre se les permita prosperar, ser
plenos, en el gozo de Su salvación, en Su paz, en paciencia para perseverar en
Su buena, agradable y perfecta voluntad. Los que buscan a Dios para encontrar progreso
en Su benignidad, para brillar con intensidad, y no descansan hasta que se les es
concedido sobreabundar en bondad, y llevar fruto a ciento por uno, para que el
mundo vea Su gloria y le glorifique.
Los que buscan a Dios para que
les sea atribuida una fe para fe, para que en Su misericordia la aumente, en
especial cuando la debilidad abruma. Para poder ver que Él está con ellos, y en
consecuencia ser inmunes al temor. Cuyo deseo es ser enriquecidos en
mansedumbre para ser obedientes a Su palabra y crecer en templanza. Para vivir
en el Espíritu y no satisfacer los deseos de la carne.
Esos simples seres que no olvidan
implorar al Padre, en el nombre de Jesús, el Cristo, nuestro Señor, para que los
haga opulentos en el más excelente de los dones: Su Amor. Para ser capaces, y continuar
siendo capacitados, en comprender cuál es la anchura, la longitud, la
profundidad y la altura, y aun conocer el amor de Cristo, que excede a todo
conocimiento. Para ser llenos de toda la plenitud de Dios, y así no vivir para ellos,
sino por Él, en Él y para Él.
A los que se les ha sido otorgado
un espíritu que gime dentro de ellos mismos, y persevera con gemidos
indecibles, en suplicar que el Carácter de Cristo sea formado en Su iglesia, en
cada uno de nosotros, para ser capaces, no sólo de soportar las tinieblas, la
corriente del mundo, sino más aun para ser luminarias en medio de ellas. En
fin, este especial pueblo, los llamados para anunciar las virtudes del Precioso,
que poseen un profundo y sincero anhelo por la auténtica prosperidad, los tesoros
en el cielo, que son sólo contemplados por los pocos.
”9 Porque ya conocéis la
gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre,
siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos”
2da.
Corintios 8:9 (RVR1960).
Otros pasajes bíblicos
considerados:
1era. Juan 4:18
Romanos 5
Filipenses 3
Hebreos 4:15-16
Juan 14:27
Hebreos 12
Colosenses 3
2da. Corintios 4:18
Isaías 55:1-2
Mateo 6:19
Lucas 16:11
Galatas 5:22-23
Efesio 3:18-19
1 Pedro 2:20-22
lunes, 21 de marzo de 2016
Como un Fruto de Justicia en medio de un Bosque, así es la Amistad
Los domingos 8 y 22 de marzo de
2015, en una simple expresión: hace ya un año, tuve la oportunidad de visitar el Parque Nacional La Tigra en Tegucigalpa, Honduras, hermoso bosque nublado, que además de satisfacer a alrededor de un tercio del total de las necesidades de servicio de agua en la ciudad Capital, también provee un verde y húmedo ambiente,
un clima acogedor y a favor de quienes quieren llegar hasta La Cascada,
que a mi juicio debe ser visitada por todo aquel que ponga un pie en este
parque, e incluso, hasta me atrevo a recomendarla a todo el que visite ese increíble
país.
Muchas analogías
y similitudes pueden observarse en la naturaleza como ejemplos de vida, de
conducta, que en realidad serán siempre una interpretación exclusiva de quien la precise, unas más inadvertidas que otras, y hasta
geniales, más sin embargo, hay verdades irrefutables más profundas que
cualquier metáfora provista por el ingenio humano, que por ser tan ciertas, ni
siquiera nos proponemos a cuestionar, en principio porque reposan en hechos
absolutos e innegables, como la sombra provista por los árboles, el verde de
sus hojas y la variedad de sus tamaños y formas, como las hojas secas en el
terreno, en la base de los árboles, sus raíces, que en algunos casos deciden mostrarse
sobre el terreno, y muchas características más que se saben ciertas y el
mencionarlas no implica novedad alguna.
No obstante, son estos mismos
hechos, esos que a los ojos de muchos son verdades indiferentes, los que poseen
una riqueza inmensurable, pues no son sólo el resultado de la
amplia naturaleza en sí misma, o de su complejidad orgánica, sino más bien de Aquel
que la creó y tomó para explicar Su reino y las riquezas del mismo, esas
riquezas celestiales, de la manera más simple, por medio de parábolas vivas, a
los que oían y aun oyen, vivientes, para describir con Su buen, agradable y
perfecto ejemplo, entre infinitas cosas, el significado de la convivencia, de la justicia, de la genuina
prosperidad, de la deliciosa armonía, del fruto de la santificación, en fin, de Su
Buena, Agradable y Perfecta Voluntad.
¡Vivamos! Abramos nuestros
ojos, pues las cosas que hoy creemos ver, y que muchas veces buscamos y
pensamos necesitar, esas que son el objeto de nuestro afán, de nuestra ansiedad,
no son las verdaderas, de cierto no son las importantes, sin embargo, con frecuencia arrebatan nuestro
tiempo, consumen nuestra vida, y peor aún, la perseverancia en ellas logra truncar nuestra posibilidad de vivir en plenitud, de sabernos genuinos, únicos,
pero a su vez tan frágiles, tan dependientes, tan necesitados de lo que no
entendemos y en consecuencia subestimamos, si, necesitados de amor, del Amor de
Dios, ese Amor que sobrepasa todo entendimiento, que entrega lo más preciado
con infinito desinterés, sin esperar más que gocemos de Su Bien.
Un
predicador alguna vez escribió: “tú dices que si tuvieses un poco más estarías satisfecho, pero tu estas equivocado, pues si no estás contento con lo que tienes hoy, no estarás satisfecho aunque tengas el doble” Charles Spurgeon. Con propiedad hoy
puedo decir que ni aun después de tener el doble mi alma se sació, y desde
entonces, he tenido presente preguntarme con frecuencia: ¿Se saciará algún día
aquel que hoy esta insatisfecho? ¿Podrá ver las verdaderas riquezas y poner su
mirada en ellas? ¿Podrá entender que lo que hoy ya posee es mucho más de lo que
hoy también es el objeto de su afán? Y he encontrado esta única respuesta: sólo
cuando se cierren los ojos para descansar del afán cotidiano, y se ruegue a
Dios con desesperación, que quite Su velo de nuestros ojos, y permita colocar
nuestra mirada en Cristo Jesús, el autor y consumador de la Fe, en fin, cuando
las verdades indiferentes de hoy ya no lo sean más, y por el contrario, sean
contempladas como valiosas perlas.
"He aquí, solamente he hallado esto: que Dios hizo al hombre recto, mas ellos buscaron muchas cuentas." Eclesiastés 7:29 Reina Valera (1909).
"He aquí, solamente he hallado esto: que Dios hizo al hombre recto, mas ellos buscaron muchas cuentas." Eclesiastés 7:29 Reina Valera (1909).
Jesús dijo:
“1 Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el
labrador. 2 Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo
aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto. 3 Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os
he hablado. 4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede
llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si
no permanecéis en mí. 5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí,
y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. 6 El que en mí no permanece, será echado fuera como
pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden. 7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en
vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho. 8 En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis
mucho fruto, y seáis así mis discípulos. 9 Como el Padre me ha amado, así también yo os he
amado; permaneced en mi amor. 10 Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así
como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. 11 Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté
en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. 12 Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros,
como yo os he amado. 13 Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por
sus amigos. 14 Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. 15 Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe
lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí
de mi Padre, os las he dado a conocer. 16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os
elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro
fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os
lo dé. 17 Esto os mando: Que os améis unos a otros. (...)” Juan 15
Y durante el trayecto, camino a La Cascada, especialmente en una parada de aproximadamente una hora, periodo al que llamamos en ese momento: tiempo devocional, pudimos meditar acerca de pasajes en la Palabra de Dios en donde es tomada parte de la naturaleza que nos rodeaba, para explicar el consejo de Dios, mas específicamente, a continuación los pasajes:
“(…) 3 a ordenar que a los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya.” Isaías 61:1-3
“1 Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo
de malos, Ni estuvo en camino de pecadores, Ni en silla de escarnecedores se ha
sentado; 2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley
medita de día y de noche. 3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da
su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará. (…)” Salmo 1
“(...) 5 Porque si fuimos plantados juntamente con él en la
semejanza de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección;
(…) 12 No
reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en
sus concupiscencias; 13 ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado
como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como
vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de
justicia.
(…) 22 Más
ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis
por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna. 23 Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva
de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.” Romanos 6
lunes, 29 de febrero de 2016
Discipulado hombres CCI Panamá
Entre pizzas, jugos y biblias, hoy dimos inicio formal a
nuestras reuniones de discipulado, las cuales estaremos teniendo los días lunes,
inicialmente cada dos semanas. En esta ocasión, tuve el privilegio de recibir a
mis hermanos en mi casa. Doy gracias a Dios por su Bondad, Cuidado y por habernos
permitido este tiempo de refrigerio.
Los puntos base de nuestro encuentro, los que también estaremos
desarrollando a lo largo de las próximas semanas, se desprenden de la biblia y de
la lectura del libro “El Plan Daniel: 40 Días hacia una Vida más Saludable”, a
saber:
- El Descanso. Desde la imperativa obediencia al Señor, hasta la necesaria pausa laboral cotidiana.
- El Stress. Antes de los afanes de la vida, sean conocidas nuestras peticiones delante de Dios.
- El Dinero. Del significado de su administración, al gozo de las riquezas verdaderas, las eternas.
- Nuestro Cuerpo. Más que salud física, es el acondicionamiento de la morada del Espíritu Santo.
Los pasajes bíblicos tratados en esta primera cita fueron:
- 1 Corintios 6:12-20. Glorificad a Dios en nuestro cuerpo.
- Lucas 19:12-27. Los siervos y las minas.
- Lucas 16:1-13. El mayordomo infiel.
- Mateo 6:19. ¿Donde hacer las riquezas?
jueves, 25 de febrero de 2016
Primer encuentro de Venezuelan Business Club (VBC) Panamá
Ya fue realizado el primer encuentro de Venezuelan Business Club (@vbcpanama), coordinado por @Emprende y auspiciado por @Banesco, @IESA y @AseMasterVe. El evento fue realizado en el Salón Marina Grand del Hotel Miramar, y se planteó como la primera cita, de una secuencia de encuentros mensuales, a realizarse en la ciudad de Panamá.
- La situación (niveles) del emprendimiento en Panamá y el área de oportunidad en la actualidad (Federico Fernández, Profesor del Centro de Emprendedores IESA).
- Estrategia de Banesco para instruir y apoyar a la base de la pirámide de la República de Panamá en el desarrollo del espíritu emprendedor (Carlos Alberto Escotet, Presidente de Banesco Panamá).
- Programas y plan de asesoramiento por parte del IESA Panamá para apoyar al desarrollo y sostenimiento del emprendimiento en la República de Panamá (José Ramón Padilla, Director del IESA Panamá y profesor del Centro de Gerencia y Liderazgo del IESA).
Ya durante la noche del miércoles 24 de febrero de 2016, VBC había realizado la cena inaugural, como antesala al evento descrito en este anuncio. Para mayor información, ingrese a su página web www.venbc.org, o sígalos en sus cuentas de redes sociales, @vbcpanama en Twitter y Vbc Panama en Facebook.
domingo, 14 de febrero de 2016
Libro: Un Ministerio Ideal por Charles H. Spurgeon
"Así, pues, téngannos los hombres por servidores de Cristo, y administradores de los misterios de Dios. Ahora bien, se requiere de los administradores, que cada uno sea hallado fiel."
1era. Corintios 4: 1-2
Ir directo a la fuente:
lunes, 8 de febrero de 2016
La Alegoría de la Caverna de Platón
“Dios sabe si esto es realmente cierto; en todo caso, lo que a mí me parece es que lo que dentro de lo cognoscible se ve al final, y con dificultad, es la Idea del Bien. Una vez percibida, ha de concluirse que es la causa de todas las cosas rectas y bellas, que en el ámbito visible ha engendrado la luz y al señor de ésta, y que en el ámbito inteligible es señora y productora de la verdad y de la inteligencia, y que es necesario tenerla en vista para poder obrar con sabiduría tanto en lo privado como en lo público.”
Ir directo a la fuente:
Vida del hombre en la
morada subterránea (Caverna)
- Descripción de la esclavitud del hombre en la tierra (dentro de la Caverna).
- Con posibilidad de acceso pleno hacia la Luz.
- La luz, producida por una fogata dentro de la caverna, no es vista por los esclavos, sólo la sombra de los objetos mostrados, por hombres “libres”, dado que tanto los hombres, los objetos y la fogata están detrás de los hombres esclavos.
- Los hombres esclavos sólo pueden ver las sombras proyectadas por los objetos mostrados por los hombres “libres” apoyados en la fogata, por estar forzados a no mover su cabeza desde niños (toda la vida) y mirar únicamente en dirección hacia donde se proyecta la sombra de los objetos.
- los hombres esclavos pensaran estar viendo y poner genuinamente nombre a los objetos, sin embargo, será a su sombra, pues nunca han visto a los objetos en sí.
- Si estos hombres “libres” hablaran, y de hecho lo hacen, los hombres esclavos creerían que estas voces provendrían de las sombras en la pared, producto de los objetos.
- La realidad de los hombres esclavos será sólo las sombras que observan, o más bien, el significado que le den a éstas.
- La liberación es un hecho natural, visto como lo que inevitablemente, tradicionalmente, ocurrirá o como representación del deber ser.
- En el proceso, el hombre esclavo sufriría por ser forzado a levantarse, girar el cuello y caminar hacia la luz, tareas que hasta ese momento jamás habría realizado por las características de su situación.
- Por el encandilamiento, el hombre en proceso de liberación, no sería capaz de ver los objetos (cosas más reales) que generaban la sombra dentro de la caverna.
- El hombre, Inicialmente, tendría problemas para precisar lo real, si las sombras o los objetos que generan la sombra. Pensaría que las sombras que antes veía (durante toda su vida) son verdaderas antes que los objetos.
- Por dolor en los ojos, trataría de eludir, evitar, colocar la mirada en la luz producida por la fogata dentro de la caverna.
- Transitar el camino hacia la verdadera Luz implica sufrimiento y hasta irritación, dado que necesariamente conlleva una acción contraria a la naturaleza humana. No en vano el autor escribe: “¿no sufriría acaso y se irritaría por ser arrastrado (…)?”
- Al inicio del proceso de ascenso, el hombre recién liberado, tendría los ojos llenos de fulgores que le impedirían ver uno solo de los objetos verdaderos, aquellos que se encuentran arriba, fuera de la caverna.
- En este nuevo mundo, el hombre necesitaría acostumbrarse, para poder llegar a contemplar las cosas de arriba. En principio, le sería más fácil mirar las sombras, luego podría mirar las figuras en el agua, reflejo de los hombres y los objetos, y entonces podría ver a los hombres y a los objetos mismos.
- Al principio, al finalizar el ascenso, al hombre le sería más fácil ver las maravillas de la noche que las del día, hasta que finalmente pueda ver al Sol propiamente dicho.
- De esta forma, ineludiblemente, el hombre concluiría: que el sol gobierna todo en el ámbito visible y que de algún modo es causa de las cosas que antes había visto.
- El hombre, en plena conciencia de su nuevo conocimiento, llegaría a sentirse feliz de su nueva forma de vida.
- Al meditar el hombre libre en los potenciales beneficios de su antigua vida, no tendría deseo alguno por honra o elogio basado en ningún mérito en esa antigua forma de vida.
- Francamente, y con plena seguridad, el hombre realmente libre “preferiría ser un labrador que fuera siervo de un hombre pobre” o soportar cualquier otra cosa, antes que volver a su anterior modo de opinar, y a aquella vida. En fin, estaría dispuesto a padecer cualquier cosa antes que soportar aquella vida.
- El hombre realmente libre se compadecería de la vida de sus compañeros (esclavitud), vida que el mismo vivió.
- Si descendiera tendría ofuscados los ojos por las tinieblas, al llegar repentinamente del sol.
- Por su nueva perspectiva, se expondría al ridículo y a que se dijera de él que, por haber subido hasta lo alto, se había estropeado los ojos, y que ni siquiera valdría la pena intentar marchar hacia arriba.
- El hombre libre, en una verdadera muestra de amor, aun si intentase desatarlos y conducirlos hacia la luz, muy probablemente lo matarían, de ser posible.
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